En los tiempos que corren, el teletrabajo se ha convertido en una necesidad. Si antes te llevabas algunas tareas de la oficina a casa, podías hacerlas casi en cualquier área de tu hogar, pero si ya hablamos de cumplir jornadas de ocho horas, urge acondicionar un espacio para realizar un home office eficiente y que también tu cuerpo agradezca.
Por eso, en El blog del experto, queremos ayudarte a crear un ambiente ideal con estas claves, las cuales te serán de mucha utilidad para mejorar tu trabajo desde casa.
Lo primero, explica Deborah Agurto, asesora experta de SINSA, es preparar el espacio de tus operaciones. “Que podás trabajar desde casa no significa que lo hagás desde la cama o desde cualquier silla sin pensar en tu postura o donde tengás que estar moviéndote cada 10 minutos. Trabajar desde casa requiere un adecuado acondicionamiento de tu home office para mejorar tu concentración y cuidar de tus documentos, accesorios y equipos tecnológicos”, indica.
Lo básico entonces es contar con una mesa amplia, una silla cómoda, los materiales que necesitás, tu computadora y una buena conexión a internet. A partir de aquí, explica Agurto, podemos empezar a montar nuestro espacio para hacer un home office eficiente.
1 – Luz natural
Tener una buena iluminación es súper importante para trabajar con comodidad y mantener la concentración. Tratá de elegir un espacio en el que podás disfrutar de luz natural para que tu trabajo en casa tenga buen rendimiento.
La luz del sol, recuerda Agurto, asesora especializada en iluminación de SINSA, es recomendada porque “cansa menos la vista y hay una estrecha relación entre la luz natural y la salud física y emocional. Además, aporta a la eficiencia iluminaria y no necesitás tener las lámparas encendidas todo el día”.
Sin embargo, poder aprovecharla depende de varios factores que a veces no podemos controlar. “Si es posible, buscá un espacio con una gran ventana por la que entre luz durante la mañana. Los roller y cortinas te pueden ayudan a suavizar la luz en las horas más fuertes”.
2 – Combinación de luces
Si lo necesitás, también podés apoyarte en lámparas que te ayuden a mantener el enfoque y un buen ritmo de actividad. Para ello, se necesita que la iluminación en home office sea lo más pareja posible, sin crear rincones con mucha luz y otros con más penumbra.
Si tenés varios puntos de luz regulá la iluminación de tu espacio durante los distintos momentos del día. “Una fórmula que no falla en espacios de home office donde hay poca luz natural o si tu jornada se alarga, es contar con una lámpara de pie, una luz central y una lámpara de escritorio”, agrega Agurto.
Otro tip a tomar en cuenta para un home office eficiente, es utilizar o priorizar la iluminación LED, ya que ofrece una luz constante sin parpadeos y además consume menos energía eléctrica.
La experta aconseja tomar en cuenta que las luces, tanto natural como artificial, nunca deben enfocar directamente a la pantalla, ya que puede generar contrastes y hacer que tengamos forzar más la vista y provocar dolores de cabeza.
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3 – Ubicación
Si tu mesa está de espaldas a la ventana la luz creará brillos en tu pantalla y también te cansarás pronto. Lo mejor es que coloqués el escritorio al lado de la ventana y tendrás un buen espacio para trabajar en casa.
Si sos diestro instalá el escritorio para que la ventana quede a la izquierda y si sos zurdo a la derecha, así evitarás las sombras. En relación a la lámpara de escritorio en home office, Agurto recomienda colocarla a la izquierda si sos diestro y a la derecha en caso contrario.
4 – Organización
Para organizar tus ideas es necesario que tu espacio de trabajo esté organizado, ya que el lugar es una proyección. La inspiración requiere de orden, y para eso es vital que contés con los elementos adecuados.
Lo primero para realizar un home office eficiente, es fijarte en las opciones que te da el escritorio como tal, es decir, en la mesa y en los posibles cajones, repisas o módulos que pueda tener.
Si en tu casa no hay un escritorio como tal, podés buscar una mesa amplia que no sea necesariamente el comedor porque es un área de alto tráfico y puede propiciar las interrupciones, pero si eso lo que se tiene a mano, conviene entonces “declarar” un área exclusiva para su uso.
Antes de elegir la mesa, tomá en cuenta qué necesitás tener a mano durante tus jornadas de trabajo remoto: cables y accesorios de la computadora, libreta de notas, teléfono y cargador, calculadora, lapiceros, tu botella de agua y una lámpara de mesa, si es necesario. Tenerlos a mano te evitará la dispersión o interrupciones continuas.
Pensá también en qué otras cosas necesitás para tu home office, si acumulás muchos papeles, si necesitás guardar materiales y tómalo en consideración a la hora de decidir qué mueble vas a usar.
Podés optar por algunos complementos como mesas de apoyo, repisas, gaveteros, para tener a mano estos insumos. Esto te ayudará a trabajar desde casa de forma más concentrada, evitando perder tiempo en buscar carpetas o materiales.
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5 – Dale tu estilo
Decorar tu espacio de trabajo en casa, además de darle personalidad al lugar puede tener sus ventajas. Por ejemplo, si pensás en una pequeña planta de escritorio tendrás una mejor calidad de aire, ya que además de absorber dióxido de carbono, liberan oxígeno, reducen la temperatura ambiente y limpian el aire de sustancias contaminantes.
Otra opción es tener cerca una planta aromática como la menta, una fragancia muy utilizada para fomentar la productividad y el rendimiento.
No olvidés incluir una foto de tu familia, mascota, pareja o destino favorito. Sin duda, te hará recordar buenos y gratos momentos, le dará un toque especial a tu home office.
Con estas claves, seguro conseguirás un espacio productivo para un trabajo remoto eficiente.
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Bonus:
Un aspecto muy importante a la hora de definir tu home office y la distribución de espacio en casa, es que te marques horarios, a modo de mini sesiones de trabajo en casa y te tomés momentos de descanso, para que te podás enfocar, minimicés distracciones y también tengás momentos para moverte un poco y despejarte.
